Cuestión de Justicia (2019).
“La desesperación es enemiga de la Justicia.”
Jamie Foxx nos vuelve a regalar una impecable interpretación en esta cinta de juicios donde encarna a un inocente reo que sufrió durante años el horror del corredor de la muerte.
Al ganador del Oscar por “Ray” le acompaña Michael B. Jordan, quien demuestra que vale más que para perpetuar la leyenda de Rocky a base de efectivos uppercuts y crochets.
“A lo mejor la gente deja de intentar matarnos cuando vean lo simpáticos que somos…”
Digna de citar como secundaria es Brie Larson, (actriz fetiche del director Destin Cretton, quien también firma el guión), y que cambia de registro totalmente al dejar los colores de la Capitana Marvel, enfundándose el traje de chaqueta que usa como letrada en favor de los más débiles en el Estado de Alabama, donde se ambienta la historia. Otro magnífico actor de reparto (quizá el mejor de la obra) es el poco agraciado Tim Blake Nelson (caracterizado para la ocasión).
“No sabe lo que es estar aquí; donde uno es culpable desde que nace (...). A la hora de la verdad no les harán falta ni huellas ni pruebas.”
El filme, de dos largas horas y cuarto de metraje, sin ser redonda, consigue su objetivo gracias especialmente al trabajo de sus protagonistas, y al retrato que su director hace del injusto racismo recalcitrante que lleva viviendo la comunidad negra en aquellos lares desde tiempo inmemorial.
“Lo contrario de la pobreza no es la riqueza.
Lo contrario de la pobreza es la injusticia.”
La crítica no la trata bien a pesar de haber obtenido algún discreto premio, pero siempre es un placer ver a Foxx actuando mientras nos muestra las imperfecciones de una de las naciones más genocidas, racistas y egoístas del planeta.
Raúl Cabral.
Puntuación personal: 6,5
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