Hillbilly, Una Elegía Rural (2020).
"Somos de dónde venimos, pero cada día elegimos de dónde queremos ser."
Ron Howard estrena este mes (tanto en los cines como en Netflix) el probablemente mejor largometraje dramático del año sobre una complicada familia del Medio Este de EE.UU. contada por su protagonista, J.D. Vance, un abogado que no siempre lo tuvo fácil.
“No te rindas, mamá.”
Gabriel Basso (a quien vimos en “Super 8” en el año en el que está ambientada esta historia) es J.D. cuando era universitario. Un joven con una empatía, paciencia y resiliencia notables. Hijo de una autodestructiva madre soltera drogadicta interpretada por la bella Amy Adams, cuya caracterización es magnífica en su entrada en barrena a lo largo de los 14 años que van desde que nuestro protagonista era un adolescente hasta el presente de la cinta (año 2011).
“Solo importa la familia en esta perra vida.”
En un papel destacado tenemos a la quizá mejor actriz de su generación -con permiso de la gran Meryl Streep- la extraordinaria Glen Close, quien aquí es la ruda abuela de J.D.
Si la caracterización de Adams es buena, la de Close es asombrosa. Y su trabajo artístico me atrevo a augurar que conllevará nominaciones y premios, al igual que el de Amy Adams, quien interpreta el papel de su vida.
Lo cierto es que todos los componentes del reparto hacen un trabajo encomiable; desde el septuagenario Bo Hopkins (“Grupo Salvaje”) hasta la linda Freida Pinto (novia de nuestro protagonista).
“En este mundo todos somos un tipo de Terminator: el Terminator bueno, el Terminator malo o el neutral.”
La obra, más que una crítica al tipo de familia rural compuesta por personas de baja alcurnia en los estados pro-Trump de Norteamérica, es una exposición objetiva del por qué la llamada “basura blanca” eligió como presidente la opción más fascista de las últimas décadas (o quizá siglos). “Hillbilly”, de hecho, es el gentilicio peyorativo con el que se conoce a los montañeros y habitantes de ciertas zonas remotas y rurales de EE.UU.
Aparte del maquillaje, la interpretación y la ambientación (el guión salta continuamente entre 1997 y 2011), destaca la banda sonora de uno de los mejores compositores actuales; Hans Zimmer. Las canciones que se escuchan son algunos de los éxitos de finales del pasado siglo.
Raúl Cabral.
Puntuación personal: 7
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