La Posesión de Mary (2019).
“Necesito ser capitán de mi propio barco. Es la única manera de prosperar.”
Rodada en 2018, estrenada en su país de origen el pasado otoño y en el nuestro en estas fechas, llega a las pantallas el último trabajo del oscarizado actor inglés Gary Oldman acompañado de la también actriz británica Emily Mortimer.
“Todos somos obras a medio hacer.”
La cinta -una mezcla de “Calma Total” y cualquiera de las muchas películas ambientadas en el misterioso Triángulo de las Bermudas- basa su estrategia de terror en manidas subidas de sonido, imágenes de espíritus malignos y oscuridad. Todo, sobre un fantasmagórico velero poseído por el mal, y con la presencia de Manuel García-Rulfo, único norteamericano de los tres actores que encabezan el reparto.
La obra, con música de los hermanos Newton y fotografía del mismísimo director del largometraje, no descubre gran cosa, no permite lucirse en exceso a sus protagonistas ni aterra lo suficiente. En resumen, un drama de horror entretenido que asusta lo justo...
Raúl Cabral.
Puntuación personal: 5,5
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