Maléfica: Maestra del Mal (2019).
"Las maldiciones no terminan. Se rompen."
El director nórdico de la última entrega de "Piratas del Caribe” nos trae la secuela de la particular visión del célebre cuento de la Bella Durmiente, centrándose de nuevo en el interesante personaje de la madrina de la princesa Aurora, encarnada una vez más por la atractiva hija del octogenario John Voight, y a quien acompaña la exmiss California Michelle Pfeiffer a sus 61 años de edad.
"El amor te sanará. Es lo que nos sana a todos."
La historia -una mezcla de "Avatar” con cualquiera de los dulces cuentos de Disney que queramos recordar- se adentra en la figura de Maléfica, donde nada es lo que parece... al menos al principio, y donde podremos ver, si miramos bien, la crítica a nuestra cancerígena especie y a su congénito egoísmo.
"Son muchos los que abusan de los inocentes. Y los de vuestra índole lo saben bien."
Como es natural, en la cinta de dos horas de metraje, tenemos todos los ingredientes de una fábula clásica; reyes, príncipes, hadas, caballeros, villanos y mucha fantasía. Todo aderezado por una digna banda sonora, un estupendo vestuario, como se espera de una superproducción de este calibre, y una bonita fotografía (diurna... porque en las escenas nocturnas habrá que tirar de imaginación pues apenas se distinguen las siluetas de los personajes...).
"Todo aquel que abandone su puesto será ahorcado."
Como no podía ser de otra manera, el poder es mostrado como ‘magnánimo' y ‘generoso', mientras el pueblo tiene que atenerse a sus caprichos, como súbditos abnegados que son respecto a unos reyes impuestos simplemente por derecho de sangre...
El largometraje, en esta ocasión, es un vehículo nacido para el lucimiento de su protagonista, y cómo no, del buen trabajo llevado a cabo por ILM y Lucasfilm entre otras compañías de CGI. Con todo, y sin ser la película fantástica del año, se deja ver y entretiene.
Raúl Cabral.
Puntuación particular: 6
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